Salí del bar y lo vi, esquivando a la gente con la lengua afuera y la mirada desatada: el mismo perro que nos había seguido la noche anterior. En ese segundo me prometí escribirlo todo.
martes, 28 de junio de 2011
Hoy en la Plaza de Mayo te dolió necesitar
Todo el sol que va quedándole a la tarde chorreándote por la cara mezclándose con tus lágrimas y tus ganas de volver al útero y quedarte ahí abrigado y apretujado por todos tus amigos que son sólo dos y te conocen hasta la parte de atrás de cada diente.
viernes, 24 de junio de 2011
Yo
miércoles, 22 de junio de 2011
Resaca
Amor
martes, 21 de junio de 2011
Empezar a suspirar
Las manos se hacen manteca y se suspenden sobre la estufa y se alivianan como alas y el tiempo se aleja y se está tan ahí que nada más importa sólo las manos que parecen a punto de quebrarse sin huesos blandas como almohadas y yo las aprieto para ver qué pasa porque no tengo miedo y todo está limpio en mi cabeza como el domingo en que nos despertamos juntos y yo me acerqué a la ventana de tu cuarto para mirar esa parte de Buenos Aires que me gusta porque es nuestra y todo de pronto se volvió tan amable que hasta los edificios sucios abrazaron mi locura y me cantaron, desde lejos, la misma melodía que ahora sale de tu boca y se me pega al oído para siempre.
viernes, 17 de junio de 2011
Papá en el microcentro
Las manos sucias y rápidas del gordo que vende las garrapiñadas en la esquina pasan por el costado de mi ojo mientras el viento me golpea la frente y yo pienso en mi papá, que está con la presión alta y la mirada triste desde hace unos días. Me vuelvo invisible me olvido del olor a caños de escape entrelazados a panchos grasosos en manos de otros que no saben me repliego y salto con los ojos hasta el bar en donde nos juntamos aquella vez papá y te pediste un whisky y me dijiste que te habías cansado de tener tanto llanto apelmazado en las pupilas.
jueves, 16 de junio de 2011
Un poema sin la palabra rocío
Vamos a escribir dos poemas
Sentados con las piernas cruzadas
Cada uno en un extremo del campo
Un domingo a las siete de la tarde
Puteando a los mosquitos
Mojándonos el culo con la humedad
del pasto
Vamos a escribir dos poemas
Y sin saberlo
Las palabras de cada uno
que no son de nadie
van a volar
Sobre las vacas
Sobre las osamentas
Sobre las hormigas
Sobre el barro del camino de tierra
Sobre los nidos de los horneros
Sobre la bosta de los caballos
Hasta encontrarse
Pegotearse
Y hacer el amor
sobre el lomo en paz
de ese perro dormido
junto a la tranquera.
Cuando el cursi ataque
miércoles, 15 de junio de 2011
Nuestro
Hay un color que no existe y que nace en la parte de atrás de tus ojos cuando pronunciás para mí las formas de reírse del miedo.
Ahí me acurruco.
martes, 14 de junio de 2011
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