viernes, 8 de julio de 2011

Las manos sucias


"¡Qué importancia le das a la pureza, chico! ¡Qué miedo tienes de ensuciarte las manos! ¡Bueno, pues sigue siendo puro! ¿A quién le servirá y para qué estás con nosotros? La pureza es una idea de fakir y de monje. A vosotros los intelectuales, los anarquistas burgueses, os sirve como pretexto para no hacer nada. No hacer nada, permanecer inmóviles, apretar los codos contra el cuerpo, usar guantes. Yo tengo las manos sucias. Sucias de mierda y de sangre hasta los codos. ¿Y qué? ¿te imaginas que se puede gobernar inocentemente?".

De Hoederer a Hugo, en Las manos sucias, de JP Sartre.

No hay comentarios:

Publicar un comentario